jueves, 26 de enero de 2012

Biblupo Humanidades Ha Sido Presentado

sábado, 21 de enero de 2012

Presentaciones con PREZI

Con la modernización de la sociedad, se han producido avances en la forma de realizar presentaciones. Desde las ya anticuadas diapositivas o transparencias, que solo podían verse con un proyector, hemos llegado a poder crear bonitas presentaciones, en las que podemos mezclar textos, videos, imágenes y movimiento, de manera fácil y con la importante ventaja que supone el hecho de que puedan ser reproducidas en cualquier ordenador.

Hasta ahora, la gran mayoría de nosotros hemos usado el programa de Microsoft office (Power Point) o el equivalente en Open Office pero, hay otros programas, también de manejo fácil, pero menos conocidos y, por tanto, menos extendidos en su uso. Una presentación hecha con un programa poco común nos dará unos resultados más llamativos y eso sorprenderá más a nuestra audiencia, garantizándonos parte del éxito en nuestra presentación. Uno de estos programas de los que hablo es PREZI.

Hay que saber que las presentaciones que creemos con esta aplicación de Internet, se van haciendo en la nube, aunque después puedes descargarla, sin ningún tipo de problema, hablamos de la cuenta PREZI gratuita, las de pago pueden ofrecerte otras cosas. Su principal novedad es el original uso del zoom, lo que le da a las presentaciones un dinamismo muy especial.

Como he dicho, es muy intuitivo, lo que te facilita mucho su uso, ya que el programa está totalmente en inglés, aunque bueno, como todos tenemos que saber hablarlo, ¡nunca está demás practicarlo!

Aquí os dejo un tutorial de uso, hecho con PREZI, que está en español, así tenemos una ayuda extra para solventar las dudas que nos surjan. Ahora solo tenéis que empezar a usarlo, para dominar todos sus trucos. A penas lo conoce nadie, por lo que vuestra presentación será siempre de las más llamativas y ¡a la que más atención se le preste!

miércoles, 18 de enero de 2012

Lo Decimos con Palabras, lo Confirmamos con Gestos

Una buena presentación oral depende de muchos factores distintos y necesita de un trabajo bastante más amplio que el hecho de prepara un power point.Lo más importante de una presentación es que el público comprenda el mensaje que le estamos transmitiendo, parece obvio ¿no? Pues muchas veces olvidamos cual es nuestro verdadero objetivo con al de intentar parecer que somos súper listos y que tenemos una retórica… que ya quisieran los antiguos griegos. Pues con esto solo conseguimos:

  1. Crear un discurso totalmente redactado, como si fuera un trabajo escrito que fuéramos a entregar y, esto, no es un discurso preparado para una exposición.
  2. Expresarnos con frases largas, llenas de conectores y gerundios que solo hacen que el público pierda el hilo general de la presentación.
  3. Nos pone más nerviosos tener que estar midiendo las palabras todo el tiempo. Usar un lenguaje natural y correcto nos ayuda a buscar sinónimos con facilidad, a encontrar otra forma rápida de explicar algo que no haya quedado claro, a improvisar.

Si cuidamos estos aspectos, podemos superar los nervios con mayor facilidad y, nos ayuda a dar seguridad a nuestro mensaje, que es necesario para que la gente crea que lo que le estamos contando, es cierto. Si nosotros dudamos de nuestras palabras, ellos dudan de nosotros.

Hay diferentes formas de mostrar que no nos da miedo estar delante de la gente, que sabemos lo que estamos diciendo y que lo estamos diciendo bien. Podemos ir variando la entonación de nuestro discurso, para hacer énfasis y para ir llamando la atención de la gente, así evitamos que dejen de prestarnos atención; lo ideal es ser dinámico. Si tenemos espacio para movernos, hay que aprovecharlo, así da la sensación de que vas buscando la atención de las personas y, además, te ayuda a abarcar a más gente porque, mirar a quienes te están atendiendo directamente, también es un gesto de seguridad y confianza, llegando a ser algo muy útil para nosotros porque nos ayuda a vigilar como está transcurriendo la presentación, es decir, si detectamos caras de aburrimiento, de interés, de cansancio, gente que no está pendiente nuestra, que hacen otras cosas…

Todo esto son indicadores de cómo se siente la gente y, como he dicho, nos ayuda a saber como van las cosas pero, pensad que esto es reciproco; igual que los gestos de los demás nos dicen cosas, nuestros gestos también lo hacen. Por eso no debemos descuidar nuestro lenguaje corporal. Todos sabemos que existe, pero no lo aprovechamos cuando más falta nos hace. Hay que mantener una buena postura, acompañar lo que estamos diciendo con gestos que vayan confirmando nuestro mensaje, así llega con más fuerza y entusiasmo.

Resumiendo, debemos preparar una presentación simple, pero prepararla, sabiendo de que hablamos y cómo lo estamos diciendo (unos ensayos previos nos ayudarán a sentirnos más seguros, y ya sabemos lo importante que es eso) siempre con un lenguaje que no sea rebuscado y utilizando los gestos y movimientos para apoyar nuestro mensaje oral.

Aquí tenemos la teoría de cómo se deben hacer las cosas, más o menos bien, ahora cada uno de nosotros tenemos que pensar que nos falta y como podemos conseguirlo, para hacer una buena exposición.



miércoles, 4 de enero de 2012

Como Ser Educado en la Red

Desde que somos pequeños, nuestros familiares nos enseñan formas básicas de comportamiento y en el colegio nos enseñan a convivir dentro de una sociedad. Para todo ello necesitamos unas normas básicas de comportamiento para poder expresarnos libremente, desde la educación y el respeto.

Actualmente existe otro ámbito en el que tenemos que aprender a comportarnos porque, también forma ya parte de nuestra vida cotidiana y, además, se está convirtiendo en un punto de contacto entre personas, donde se pueden conseguir oportunidades nuevas, proyectos, información y amistades.

Tenemos que tener claro que también tenemos que cuidar nuestro comportamiento y nuestra apariencia en la red porque, como he dicho, pueden interesarse por nosotros a través de esta medio. Además de cerciorarnos de que la información que obtenemos sea fiable, de velar por los derechos de autor y por nuestra ppropia privacidad, es importante ser educados y correctos. En Internet no nos cobran por el uso de caracteres, como nos pasa con los mensajes de texto de los móviles, así que tendríamos que escribir siempre sin ninguna falta de ortografía (es muy fácil hacerlo gracias a los correctores ortográficos. No cuesta nada), y desarrollando nuestras ideas de forma correcta y ordenada. Solo por que escribamos en una red social, no tenemos que perder las formas, así que lo mejor también es hacer uso de un lenguaje correcto, evitando las subidas de tono y las palabras malsonantes.

No deberíamos olvidar tampoco que, al igual que nos han enseñado a no hablar con desconocidos, en Internet debemos identificarnos con un usuario, no tiene porque ser con nuestro nombre y apellidos, pero si de forma que se puedan dirigir a nosotros los demás usuarios.ropia privacidad, es importante ser educados y correctos. En Internet no nos cobran por el uso de caracteres, como nos pasa con los mensajes de texto de los móviles, así que tendríamos que escribir siempre sin ninguna falta de ortografía (es muy fácil hacerlo gracias a los correctores ortográficos. No cuesta nada), y desarrollando nuestras ideas de forma correcta y ordenada. Solo por que escribamos en una red social, no tenemos que perder las formas, así que lo mejor también es hacer uso de un lenguaje correcto, evitando las subidas de tono y las palabras malsonantes.

Los emoticonos, por ejemplo se usan para dar más expresividad o acentuar las bromas, pero no es lo más adecuado cuando estamos usando un nivel formal de comunicación. Ni tampoco es correcto usar las mayúsculas más que cuando las reglas ortográficas lo exijan porque en las Web, si escribes en mayúsculas en un foro, un chat o un blog, es como si estuvieras gritando y, por tanto, perdiendo los modales, lo que estropearía nuestra imagen virtual que, poco a poco, va siendo más importante dentro de los ámbitos académico y laboral.


Así que recordad: Cuidad vuestra imagen virtual, ya tiene un peso muy importante y, en un futuro, será aún más importante. Puede llegar a convertirse en nuestra identidad más conocida y, por medio de ella, relacionarnos con otros profesionales de todo el mundo.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Derechos de Propiedad en la Web

Desde que Internet entró en nuestra vida cotidiana, todo está cambiando de forma más o menos rápida, o más o menos aceptada por los usuarios. Hay algunos cambios que ya conocemos todos, como la facilidad de comunicación, la enorme cantidad de información a la que podemos acceder o las gestiones que podemos tramitar vía Web, pero en otras materias, estamos un poco más desinformados, como en el uso de ciertas aplicaciones o en el tema que quiero tratar hoy: Los derechos de propiedad.

¿Tiene dueño todo lo que está en la red? Por supuesto que sí, todo ha sido hecho por una persona o un grupo de ellas, a las que se les debe respeto por su creación pero, lo que ya no empieza a estar tan claro es todos los autores quieren acogerse a las obsoletas normas del Copyright o de la propiedad intelectual. Hay muchas personas que quieren difundir su obra libremente y sin obstaculizaciones, otros autores, por ejemplo, pueden estar de acuerdo en que su obra sea modificada o actualizada si salen nuevas investigaciones con nuevos resultados, simplemente, para enriquecer el conocimiento general sobre un tema e Internet, nos da esa posibilidad de compartir nuestro trabajo sin obstáculos pero, este mundo de posibilidades nos lleva a otra pregunta ¿cómo hacer esto oficial para que nadie tome represalias con el usuario al margen de los deseos del autor?

Con la intención de responder a esta pregunta y para facilitar el proceso a aquellos que quieren compartir su obra con los demás nacen las licencias Creative Commons. Estas licencias se basan en cuatro cuestiones para desarrollar seis tipos licencias diferentes, así los autores pueden elegir la que más se adecue a su criterio. Las ideas principales con las que Creative Commons desarrollan sus licencias son:

  • Reconocimiento del autor de la obra SIEMPRE, aunque le demos otros usos.
  • No comercial, o lo que es lo mismo, que no puedes lucrarte con una obra que no es tuya, aunque si puedes citarla y usarla, siempre que no obtengas beneficios económicos por ello.
  • Sin obra derivada, lo que implica que puedes darle cualquier uso a la obra, incluso corregirla o ampliarla, pero no puedes hacer una obra nueva, basándote en esa.
  • Compartir igual la obra significa que solamente puedes distribuirla en las mismas condiciones que el autor le impuso.

Con este avance y diversificación de los Derechos de Autor pasamos de una mentalidad en la que se promulgan todos los derechos reservados (Copyright) a otra de solo algunos derechos reservados y puede que algún día lleguemos a una sociedad en la que lo ideal sea el Dominio Público.

Si queréis más información a cerca de cómo obtener estas licencias y que se necesita para ellas, podéis consultar la página española de la compañía.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Trabajando en Cooperativo


Cada día usamos Internet para buscar información y para realizar tanto nuestros trabajos para los estudios como los proyectos e informes para las empresas y, normalmente


Gran parte de la dificultad de realizar cualquier tipo de proyecto o trabajo en grupo es hacer coincidir a todos sus miembros y, aquí mi pregunta, ¿si usamos Internet pr
ácticamente para todo, porqué no también para organizar los trabajos en grupo?, todo esto solemos hacerlo junto con otros compañeros.

Pues, aunque no esté muy extendido, ya somos muchos los que usamos aplicaciones como Google Docs. Aquí, con tu cuenta de Gmail, puedes crear un documento, que queda guardado en la nube, y decidir si quieres compartirlo con todo el mundo, solo con aquellos a quién tú mismo selecciones o no compartirlo.

Si decides compartir dicho documento con ciertas personas, como tu grupo de trabajo, por ejemplo, puedes hacerlo de varias formas: Puedes compartir con ellos el enlace que te lleva directamente al documento resultante o, si tienen cuenta de Gmail, puedes compartir con ellos el mismo enlace, pero puedes darles permiso para editarlo, es decir, que los miembros de tu grupo pueden continuar escribiendo el documento que has creado y modificarlo como quieran.

De esta forma, es mucho más fácil hacer los trabajos en grupo porque, cuando le venga bien a cada uno, puede acceder al documento compartido desde su propia cuenta y añadir lo que quiera o pueden participar todos los miembros invitados a editar el documento, a la vez. Es muy cómodo porque, cuando cada miembro del grupo está escribiendo, justo encima del cursor aparece una etiqueta con su nombre y, además, como la barra de herramientas de Google Docs es casi un calco de la barra de herramientas de Word, todos sabemos usarlos y, así, cada miembro del grupo puede escribir en un color o una fuente diferente (para distinguirse) y, una vez acabado el trabajo, se le da unidad al texto.

Como he dicho, funciona igual que el Word así que, se pueden insertar imágenes o hipervínculos, notas a pie de página, foliación… Para mayor funcionalidad, la herramienta cuenta con un chat, para que todo el grupo pueda comunicarse de manera instantánea.

Por último, cuando ya hayamos terminado por completo el documento, podemos descargárnoslo de la nube y guardarlo en nuestro ordenador (o imprimirlo) en el formato que queramos, lo que es muy práctico y puede sernos de gran utilidad también porque, si queremos convertir un Word en pdf, por ejemplo, podemos subir dicho documento a Google Docs y cambiarlo de formato desde dicha herramienta que, además de cambiar documentos de formato, crearlos, permitirnos compartirlos y trabajarlos en grupo, nos puede servir como almacén de documentos. Aquí podemos subirlos, editarlos, compartirlos o, simplemente guardarlos.

Las nuevas herramientas de Internet vuelven a ofrecernos una nueva forma de trabajar que pienso que podría ser muy beneficiosa para todos.

sábado, 26 de noviembre de 2011

Fondos Antiguos de las Bibliotecas

Cuando se produjeron las desamortizaciones de los bienes del clero, las obras que formaban las bibliotecas de los conventos pasaron a formar parte de las colecciones de las universidades o de las bibliotecas públicas, si en la ciudad donde se producía la desamortización no había una universidad pública.

De esta forma llegaron a la Biblioteca General de la Universidad de Sevilla algunos de los manuscritos, códices e incunables que ahora forman parte del fondo antiguo de esta biblioteca, donde podemos encontrar obras de hasta el siglo XIV.

Por las muestras que pudimos ver allí, la colección es muy valiosa y variada. Hay manuscritos, tienen un ejemplar del primer libro que se imprimió en la historia, volúmenes realmente escasos, otros más comunes, libros ilustrados con importantes grabados y decoraciones en colores típicos de los miniaturistas flamencos.

Todos los tesoros que están custodiados y cuidados en la universidad (donde se encargan de desparasitarlos y restaurarlos si es necesario) pueden ser consultados por cualquiera de nosotros, ya que un amplio porcentaje, esta valiosísima documentación ya está digitalizada. En caso de que se esté realizando una investigación, se pueden consultar los originales en la sala de los investigadores y, evidentemente, los volúmenes no pueden salir de allí.

En esa misma sala trabajan los encargados de organizar y preservar el fondo antiguo de la universidad pero, aunque te dejen consultar los libros en una sala de lectura, pienso que estos trabajadores hacen más una función de archiveros que de bibliotecarios, por la antigüedad y, por tanto, por el tratamiento especial que deben recibir para asegurarnos de que ninguna obra se dañe demasiado y, una de las medidas que se toman para eso es que el usuario no entra a donde se guardan los libros a pasearse entre las estanterías y toquetear, sino que los propios encargados del fondo lo buscan y te lo dan en la sala de investigadores (como se hace en los archivos). También me recordó a un archivo porque los legajos no pueden ser prestados y, además, se está digitalizando todo. Pero, lo que hace que este fondo no sea un archivo, es que no está organizado como tal: Las obras están organizadas por siglo, sin responder al Principio de Procedencia, (ley básica de la archivistica) ni a cuestiones puramente físicas (tamaño, forma del documento) para las que, en un archivo, se llegan a crear secciones a parte, por motivos de conservación.